jueves, 21 de octubre de 2010

Argumentación 5: recursos retóricos

Aunque generalmente la Filosofía tome como modelo el razonamiento formal y riguroso, mantiene una conexión estrecha con la literatura y la retórica.

La retórica es una disciplina que investiga cuáles son las técnicas más eficaces para convencer y persuadir.

Hay filósofos que se han expresado con un lenguaje más cercano a la literatura que a la lógica, sobre todo en obras de divulgación para el gran público. Incluso los hay que han elaborado buena parte de su obra con un lenguaje poético, como es el caso de Nietzsche:

"Habéis recorrido el camino que lleva desde el gusano hasta el hombre, y muchas cosas en vosotros continúan siendo gusano. En otro tiempo fuisteis monos, y también ahora es el hombre más mono que cualquier mono. Y el más sabio de vosotros es tan sólo un ser escindido, híbrido de planta y fantasma.
Pero ¿os mando yo que os convirtáis en fantasmas o en plantas?
¡Mirad, yo os enseño el superhombre!
El superhombre es el sentido de la tierra. Diga vuestra voluntad: ¡sea el superhombre el sentido de la tierra!
¡Yo os conjuro, hermanos míos, permaneced fieles a la tierra y no creáis a quienes os hablan de esperanzas sobreterrenales! Son envenenadores, lo sepan o no.
Son despreciadores de la vida, son moribundos y están, ellos también, envenenados, la tierra está cansada de ellos: ¡ojalá desaparezcan!
" (Así habló Zaratustra).

Los recursos retóricos más utilizados en obras filosóficas son metáforas, alegorías, quiasmos, interrogaciones retóricas, exclamaciones, comparaciones, símbolos, metonimias, sinécdoques, antítesis, oxímoron, paradojas, ironías, arcaísmos, neologísmos, etc.

Podéis conocer éstas y muchas más figuras retóricas en elvelerodigital.com.
Licencia de Creative Commons
Este obra está bajo una licencia de Creative Commons Reconocimiento-NoComercial-SinObraDerivada 3.0 Unported.